La pérdida de un ser querido es muy dolorosa y se ve agravada por la abrumadora tarea burocrática que exige la gestión y reparto de la herencia en un momento en el que el heredero o legatario no se encuentra emocionalmente en su mejor momento.
Somos expertos en solucionar conflictos sucesorios, ya que, en el reparto de una herencia, puede involucrarse un número importante de personas con intereses contrapuestos.
Nuestra experiencia nos ha llevado a no conformarnos con soluciones precipitadas que puedan suponer una fractura de relaciones entre los familiares supervivientes, sino a buscar y aplicar una cuidada metodología en la aplicación de criterios de partición y adjudicación de los bienes del fallecido; y el mantenimiento de la paz familiar.
La normativa sucesoria en España es extremadamente compleja, y exige un asesoramiento especializado, puesto que existen distintos derechos según el territorio del que el fallecido ostentase su vecindad civil y, cada uno de esos ordenamientos genera distintos derechos y obligaciones a los sucesores. Las normas aplicables no serán las misma si el fallecido ostentaba la vecindad civil común, la catalana, la navarra, o cualquier otra, sin olvidad que la gestión del impuesto de sucesiones está cedida a las Comunidades Autónomas y cada una de ellas puede fijar diferentes bonificaciones según el grado de parentesco con el fallecido.
Los necesarios son el certificado de fallecimiento, certificado de últimas voluntades, certificado de seguros de cobertura de vida, certificado de saldos de productos bancarios y préstamos a fecha de fallecimiento, libro de familia, notas simples de los bienes inmuebles que pueda tener el fallecido, el testamento -si existe-, cualquier otra prueba documental que acredite la existencia de bienes, derechos u obligaciones de la persona fallecida. También sería útil la información relativa a los datos personales del conjunto de herederos.
Nosotros podremos ocuparnos de la mayoría de ellos, muy especialmente de obtener los certificados.
Sí, se puede cambiar un testamento cuantas veces se quiera.
Es una parte de la herencia que la ley atribuye a un heredero concreto, y sobre la que el testador no puede disponer. Es una limitación a la libertad del testador que tiene que respetar la legitima, aunque le parezca injusta.
Podemos encargarnos de todos los trámites necesarios para trasmitir tu patrimonio a tus seres queridos de una manera segura, para evitar conflictos familiares posteriores, asegurarte que el destino de los bienes se ajuste a tus deseos.